El Dr. Alejandro De Cerchio, coordinador de la Red Federal Corazón-Cerebro (RFCC) región NEA y jefe de la Sección Hipertensión Arterial del Instituto de Cardiología de Corrientes (ICC) participó una vez más en la edición virtual del XXXVIII Congreso Nacional de Cardiología organizado por la Federación Argentina de Cardiología (FAC).
Durante su presentación: “Importancia de evaluar la cognición del paciente hipertenso”, el Dr. De Cerchio, destacó el impacto silente de la hipertensión sobre la circulación cerebral aumentando no solo el riesgo de ACV sino también el riesgo de comprometer las funciones cognitivas. Mostró evidencia sólida que demuestra que el 30% de los hipertensos presentan daño del cerebro como órgano blanco incluso con indemnidad de otros órganos como el corazón y el riñon y como, más de la tercera parte de ellos presenta deterioro cognitivo sin daño funcional, haciendo imprescindible el uso de test neuropsicológicos para poder evaluar el status cognitivo.
A continuación, refirió su exposición sobre la importancia de utilizar el test del reloj como herramienta para detectar el daño cognitivo, en especial aquel que afecta al dominio de las funciones ejecutivas, funciones especialmente comprometidas en los pacientes con enfermedad vascular del cerebro. Presentó algunos casos clínicos de pacientes jóvenes con severas alteraciones en el test y remarcó que el test del reloj es sencillo y rápido de administrar en la práctica asistencial del médico cardiólogo o clínico y de fácil interpretación en sus resultados. Hizo especial hincapié en su alta sensibilidad y en el hecho que, no se ve influenciado por la presencia de trastornos conductuales (ansiedad y/o depresión) que pueden distorsionar el resultado y son frecuentes en los pacientes hipertensos.
Finalmente, reforzó el concepto que la detección precoz del daño cognitivo permite implementar medidas tales como, el mejor control de la hipertensión arterial y otros factores de riesgo tales como: el hábito de fumar cigarrillos, la actividad física, el control del peso, todos los cuales han demostrado sobrados beneficios no solo ralentizando el avance de la disfunción cognitiva, evitando el compromiso funcional (progresión a demencia), sino incluso, mejorando su los déficits cognitivos.
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